Si en casa tienes un peludo cuya raza es considerada como potencialmente peligrosa, probablemente te hayas planteado la contratación de un seguro PPP.
Hoy vamos a contarte todo lo que debes saber sobre este seguro, qué dice la ley sobre estos perros, por qué deberías contratarlo y mucho más.
¿Qué es un perro PPP?
Si estás aquí, seguramente sea porque estás buscando un seguro PPP, por lo que debes conocer el término, pero por si acaso, te vamos a contar que significan estas siglas.
El seguro PPP hace referencia al seguro para perros potencialmente peligrosos. Todos sabemos que cualquier perro con un dueño que no se ocupa de educarlo de forma adecuada puede convertirse en un perro peligroso, y los catalogados como perros peligrosos generalmente no lo son tanto, ya que habitualmente sus dueños son personas más concienciadas que saben el daño que podría hacer su perro si no es educado correctamente.
En cualquier caso, por bien educado que esté, nuestros amigos peludos no dejan de ser animales y pueden llegar a ser imprevisibles, por lo que contar con un seguro PPP puede ser más que recomendable.
Qué dice la ley
Una raza entra en la categoría PPP por 3 motivos principalmente: peso/dimensiones, carácter y daño potencial, es decir, si el perro atacase, cuánto daño potencialmente podría llegar a hacer y no necesariamente son razas que hayan atacado con mayor frecuencia que otras razas.
Actualmente, las razas de perros potencialmente peligrosos que se incluyen en esta lista serían los siguientes:
- Pit bull terrier
- Staffordshire bull terrier
- American staffordshire terrier
- Rottweiler
- Dogo argentino
- Fila brasileño
- Tosa inu
- Akita inu
- Aquellos que sean cruce de las razas mencionadas.
Cada comunidad puede añadir a la lista razas adicionales, por lo que te recomendamos que consultes la legislación vigente en tu comunidad, así como consultar otras comunidades si vas a desplazarte allí con tu perro.
Adicionalmente a estas razas, otros perros pueden ser considerados potencialmente peligrosos en función de crterios tales como la musculatura, peso, o tamaño de la cabeza entre otras tantas variables.
Como te decíamos, lo ideal es que si crees que tu perro puede llegar a entrar en la categoría de perro potencialmente peligroso, cuente con su seguro PPP, para mayor tranquilidad.
Por qué contratar un seguro PPP
En primer lugar, si eres poseedor de un perro potencialmente peligroso, debes cumplir una serie de requisitos, estos son:
- Ser mayor de edad y estar capacitado para educar y cuidar del perro.
- Registrar al perro en el Registro de Animales Potencialmente Peligrosos.
- No tener condenas relacionadas con la violencia o la salud.
- Poseer un certificado que certifique tus aptitudes para la tenencia de un perro PPP.
- Otro certificado de un veterinario que indique que el perro se encuentra en buen estado de salud, vacunado, desparasitado y no observa agresividad.
- Por último, un seguro PPP que cubra daños a terceros, con una cobertura no inferior a 120.000€.
Es decir, la contratación de un seguro para perros potencialmente peligrosos, además de ser muy recomendable es obligatoria.
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